Desde hacia tiempo tenia ganas de realizar una excursión a un lugar a donde ibamos de chicos y de donde volviamos de un color rojizo plateado brillante, que excepto a nuestras Madres, a todos nos encantaba: las Minas de la Herrería.
Hace unos días, junto con mi hermana Inma y y su marido Luis, nos pusimos en camino y siguiendo las indicaciones de Enrique y José Manuel llegamos sin demasiados contratiempo. Las vistas y el paisaje son impresionantes.
El regreso lo hicimos por el sendero que conduce a la Piedra Santiago y por supuesto, la tentación nos llevo a encaramarnos encima y recordar las noches de estrellas fugaces que contemplamos desde allí y algunas cosillas más que no se cuentan....
Recomendamos el paseo.
Saludos