Pues ahora que ya habéis disfrutado unos diitas de las fotos de la nieve en nuestro pueblo y de la idea romántica y bucolica de un Guadalcanal serrano y nevado... ahora es cuando toca decir que ¡valiente porquería!. Muy bonito el domingo y los copitos de nieve, muy bonito todo nevado, muy bonito mientras duró y... ¡no duró naaaaaaa de naaaaa!. Se puso a medio llover el lunes, a llover el martes, a seguir lloviendo el miercoles y de la nieve no queda ya nada más que un desagradable recuerdo.¿Qué porque digo desagradable? pues porque después de las continuas lluvias y de las heladas, vino la nieve y cuando se derritió se llevó al suelo todas las pinturas de las fachadas que no estaban pintadas recientemente. De manera que tenemos casi todas las calles y los patios llenos de caliches cual nieve "guarrona" y no hay quien los despegue del suelo porque aún está mojado. ¿Envidia Nuria?. Envidia me da lo de Andorra.