A pesar del frío y la lluvia, nuestros pequeños cofrades no han querido perderse las procesiones de esta bonita y entrañable Semana Santa. Está claro que estas nuevas generaciones pretenden mantener vivas nuestras tradiciones.
Espero que con el paso de los años no la conviertan en una fiesta más y mantengan el verdadero sentido cristiano de esta celebración. ¡ Dios nos ayude a sus padres a guiarlos en esta dificil tarea¡
Ahí tenéis algunas instantaneas de estos días para el recuerdo.
¡ Feliz vuelta a la rutina diaria ¡